El Estadio Santiago Bernabeu volvió a ser talismán para el Real Madrid cuando mas lo necesitaba. Cuando la eliminatoria estaba cuesta arriba volvió la magia y un gol de Rodrygo devolvió la esperanza a los blancos después de ir con un 0-3 en contra a falta de diez minutos.

Pero es que la semana pasada en Stanford Bridge, el Real Madrid sacó una cómoda ventaja de 1-3 que parecía definitiva en esta eliminatoria. En esa ocasión el Madrid brilló con un fútbol de toque y buena posesión y ganó cómodamente al actual campeón de la Champions.

Su entrenador Tuchel, declaró incluso al final de ese partido que la eliminatoria estaba perdida y un sin fin de cosas mas. Un malabar de palabras para confundir a los blancos y no mostrar su estrategia para igualar la eliminatoria y porque no, eliminar al Real Madrid en su propia casa.

Tras la debacle en Inglaterra y necesitado de goles, Tuchel deshizo la defensa de tres centrales y  prescindió de Andreas Christensen apostando por Marcos Alonso en el lateral izquierdo y dejando a Azpilicueta en el banquillo. Reforzó la media cancha con Kovacic y Loftus -Cheek, titulares en detrimento de Jorginho. Colocando al frente del ataque a Timo Werner en lugar de Pulisic. Todo un estudioso de su rival.

Por su parte , Ancelotti apostó por Nacho Fernandez debido a la sanción de Eder Militao como pareja de David Alaba en el centro de la defensa. Mantiene a Fede Valverde para dar energía y velocidad al juego.

Bajo las ordenes del arbitro polaco Szimon Marciniak, quien estuvo acertado en las decisiones que tomó. Este arbitro le ha pitado al Madrid en cinco ocasiones, cuatro en Champions y una vez en la Supercopa. El Madrid Nunca perdió con este arbitro en Champions, solo una derrota en la Supercopa.

Comenzado el partido , Chelsea se asentó mejor en el terreno de juego y el equipo blanco se vio sorprendido por las posiciones y posesión del equipo Ingles que fue netamente superior al equipo blanco.

La media cancha del Madrid no encontraba su sitio y todas las pelotas divididas y por alto eran ganadas por el equipo de Tuchel. Así el Chelsea era mas que el Madrid y en el minuto 15 Mason Mount aviva la eliminatoria con el primer gol de la noche a favor del equipo Ingles. Error defensivo de los merengues aprovechado de buena forma por el jugador Ingles.

Así terminó la primera parte con los Blues metiendo a su rival en la mitad de campo propio y con mucha paciencia en la construcción de los ataques.

A los 51″ Rudiger empata la eliminatoria con un cabezazo al que Courtois no puede hacer nada. Sin tiempo para reaccionar. En este momento, el publico presagiaba lo peor.

A los 62′ Marco Alonso se interna el área blanca al recibir un balón, que según el VAR tocó la mano del español internacional. Hubiera sido el 0-3 lapidario para el Real Madrid. El arbitro anuló el gol y la eliminatoria seguía igualada.

En el 63′ Benzema estrella un cabezazo contra el larguero en una magnifica jugada del equipo blanco. Se esperaba la reacción en el Santiago Bernabeu.

Pero a los 75′, Timo Werner , triangula por por el sector izquierdo, entra al área , amaga el disparo, deja sentado a Carvajal, amaga por segunda vez y realiza un remate flojo que entra despacito a la portería. Era el 0-3 a falta de 15 minutos para el final. Muchos hubieran dado por muerto al Real Madrid.

LA MAGIA DEL BERNABEU

El Real Madrid tiene un ADN único en esta competición. Nunca lo puedes dar por eliminado. Faltaba poco tiempo, un gol igualaba la eliminatoria y enviaba el partido a la prórroga. El Madrid resucitó en el tiempo que quedaba.
Modric con sus 37 primaveras se inventó un pase de tres dedos al corazón del área que Rodrygo sin dejarla caer la incrustó en la portería de Mendy.

El Bernabeu estalló en toda su grandeza. Otra noche mágica de Champions o de Copa de Europa como se llamaba antes. El espíritu de Don Santiago rondaba por el campo madridista, el partido se iba al tiempo extra. Treinta minutos mas de fútbol. Ancelotti había dado entrada a Marcelo, Lucas Vazquez, Dani Ceballos, Camavinga y la acertada entrada de Rodrygo.

Llegó el tiempo extra y a los 96′ como en esos cuentos de hadas apareció Camavinga que cede a Vinicius por el lado izquierdo, este corre como unos 20 metros y como con la mano le da una asistencia perfecta a Benzema que de cabeza mete el gol de la eliminatoria. El Madrid pese a ir perdiendo 2-3, lleva ventaja de un gol.

Así terminó el partido, 2-3. La casa Blanca y la afición de Chamartin festejó la clasificación a semifinales en la presente edición de la Champions. En su torneo favorito, donde el ADN del Madrid siempre esta presente. El Chelsea fue un digno rival. Nunca den al Madrid por eliminado.

Ahora espera al ganador de la eliminatoria entre el Manchester City y el Atlético de Madrid. Podría haber clásico en la Champions. Veremos que se nos viene. El Madrid vuelve a estar en la instancia decisiva y hay que contar con Modric y todo el equipo blanco.