Impresionante final en Wembley, nos ofrecieron estos dos equipos ingleses, dos de los mejores de Inglaterra. Por un lado el Liverpool de Kloop y en el otro el Chelsea de Tuchel.

La final duró 120 minutos, sin goles legales, prórroga y 22 penaltis. Hasta 4 goles anulados, dos para cada equipo y un partido vibrante, estrepitoso, a una velocidad que solo la Premier League ofrece.

Un partido de ida y vuelta que se saldaba con paradas increíbles de los porteros, por un lado E. Mendy, salvaba al Chelsea con paradas increibles, mientras Kelleher por Liverpool copiaba a su par.

Goles anulados, postes, varios mano a mano, de Luis Díaz y Salah, y otros similares por parte del Chelsea, mucho fútbol y mucha clase. Desde el inicio hasta el final, incluyendo el minuto 119, en el que el portero Senegalés Mount, del Chelsea, fue sustituido por Kepa, el portero titular de la Liga, que supuestamente detendria algún penalti.

Pues no fue así y el castigo, tipo Karma, se cebó sobre el Español, aunque yo diría más bien sobre su entrenador, Tuchel, porque ni paro ninguno de los 11 penas máximas que le lanzaron, casi de manera perfecta y, de paso, fallo el que él lanzo, dando la Copa al Liverpool.

Un partido que no se puede reprochar a ninguno de los jugadores, una afición dividida rugiendo como leones los 120 minutos y, lo más bonito a parte del espectáculo futbolístico, fue la impresionante pequeña ceremonia de apertura.

Con motivos alusivos a la guerra que inició Rusia contra Ucrania y que demostraron, público, jugadores y organización, un apoyo apabullante a Ucrania por la injusta invasión. Ojalá el mundo entero de muestras de repudio y rechazo a tan injustificada acción militar y presione para que acabe pronto.

Que viva fútbol. Enhorabuena al Liverpool, Campeón de la Carabao Cup de Inglaterra. 92 equipos la disputaron, 9 títulos para el ganador, máximo en la historia de la Copa.