Lo que parecía ser un partido de trámite para una de las favoritas del torneo, se convirtió en una auténtica tragedia.

Los argentinos se adelantaron a los 10 minutos con un penal ejecutado por su estrella Lionel Messi.

Un penalti señalado por el árbitro, el esloveno Tomaz Klancnik, después de acudir al VAR ante un empujón dentro del área.

Según la nueva regla los defensores ya no podrán tomar a los delanteros en forma alevosa y esto fue lo que interpretó el VAR , que avisó al árbitro para revisión de la jugada.

Argentina se posicionó mejor en el primer tiempo y hasta tres goles fueron anulados a los argentinos por posición adelantada.

El equipo Arabe jugaba siempre al borde de la línea del fuera de juego

Los Sauditas no se desordenaron en defensa y siguieron con su estrategia indicada por el buen técnico H. Renard.

Pero la historia estaba por escribirse en el segundo tiempo y de qué forma. Nada está escrito en el planeta fútbol siempre los décimos en este medio .y al parecer Scaloni no leyó bien el partido.

Los árabes mordían los tobillos de los argentinos que los superaron en casi todos los duelos.

De esta forma es estadio de Lusail, fue testigo de una triunfo Árabe que pasará a la historia para el fútbol de esta nación.

Dos golazos de los saudíes, a los 48 minutos de Saleh Al-Shehri y de Salem Al-Dawsari a los 53 minutos , voltearon el partido a favor del país petrolero.

Dos golazos en cinco minutos. Ni el mas conocedor de este deporte esperaba tal reacción y resultado.

Argentina no pudo recuperarse del shock de los dos goles saudíes.

El equipo argentino no estaba en desventaja en el marcador desde el primer gol de Brasil (anotado por Gabriel Jesús) en la semifinal de la Copa América de 2019. Hace tres años y medio.

Es un equipo mucho más acostumbrado a administrar ventajas que a ir desde atrás en el resultado.

Las individualidades tampoco anduvieron, y por eso Lionel Scaloni tomó una decisión inusual: hacer tres cambios juntos. Ninguno dio resultados. Como casi todo en la aciaga tarde qatarí.

Tras la derrota 2 a 1 frente a Arabia Saudita en el debut mundialista de la Selección argentina, el capitán del plantel, Lionel Messi, analizó lo que pasó en el enfrentamiento inicial por la Copa del Mundo en Qatar.

“No hay excusas”, aseveró el diez, que anotó el primer y único gol del plantel que conduce Lionel Scaloni, y hacia adelante indicó: “Habrá que demostrar que somos un grupo de verdad”.

Argentina deberá ahora vencer a México y Polonia si quiere seguir vivo en esta copa del mundo.

Mientras los árabes , pase lo que pase ya habrán hecho su mundial por haber al coloso suramericano.